¿No habéis tenido nunca ese mal sabor mental de pensar que la gente no trabaja con seriedad? La verdad es que me causa un extraño desasoiego cada vez que llevo un vehículo al taller y, no es precisamente de ahora, sino creo que ésto lo he sentido desde siempre.
Ayer, llevé mi AC a un taller oficial. Suelo llevarlo siempre al mismo sitio y no es que me inspiren una gran confianza. Creo que lo hago así, porque pienso que si pasa algo, la garantía oficial siempre será más verdadera, digo yo. El caso es que siempre que salgo de un taller, me siento como si me hubieran engañado, si no es por el trabajo, es por la cuenta.
En fin, muchas veces me digo que es soy desconfiado por naturaleza, pero no me siento bien con el trabajo realizado y diréis que proteste, pero es que verdaderamente no sé si son alucinaciones mías o es que las cosas no son como deberían.
-Tiene que pasar la ITV, no funciona el claxon y ya que estoy aquí le cambiamos el aceite- dije.
-¿Cambiamos los filtros de gasoil y aceite también?- el recepcionista.
-A ver, si hay que cambiarlos ...- respondí.
-Por los años que tiene, ¿le habrá cambiado la correa de distribución?- preguntó.
-Pues no tengo ni idea, pero de momento lo vamos a dejar.
Más tarde, me enteré de que hay que cambiarsela cada cinco años o noventa mil kilómetros y los primeros ya los tiene, pero los segundos, no; así que, espero que todo vaya bien y el año próximo será el cambio. La broma puede ser de cuatrocientos euros más el IVA.
Cuando llegué al parking -cuatro kilómetros más allá- me parecía que olía a "quemao".
Yo que sé, sigo igual de intranquilo. Pero me pasa siempre.
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